Las consecuencias sociales de los desastres naturales

Aunque algunos aún lo nieguen, el cambio climático es una realidad, y según apuntan los expertos, una de las principales y más trágicas consecuencias que trae consigo es el aumento de los desastres naturales. Terremotos, huracanes, ciclones, tormentas tropicales, olas de calor…  cuando suceden, ocupan portadas en informativos de televisión y periódicos pero poco a poco van cayendo en el olvido mediático y de la sociedad en general. Ahora las miradas están puestas en Japón, pero ¿qué fue de Haití, Pakistán, Filipinas, Indonesia o Chile entre otros tantos?

Pues bien, debemos ser conscientes de que el año 2010 ha sido el año más mortífero de las últimas dos décadas. Los desastres naturales produjeron casi 300.000 víctimas mortales, afectaron a cerca de 208 millones de personas y produjeron un coste de cerca de 80.000 millones de euros.

Por continentes, América registró el 75% de los fallecimientos, la mayoría debido al terremoto que ocurrió en Haití hace poco más de un año, que se llevó por delante la vida de más de 220.000 personas. Además, otro seísmo, el de Chile, mató a más de 500 personas y fue el más costoso en términos económicos, valorado en unos 22.000 millones de euros.

Aunque ha registrado menor número de muertes, Asia ha sido el continente con mayor número de personas afectadas, mientras que Europa ha representado casi una quinta parte del total de fallecidos, la mayor parte debido a la ola de calor del pasado verano en Rusia.

Todos estos datos proceden de un informe que ha dado a conocer el Centro para la Investigación sobre la Epidemiología de los Desastres  (RIMD) y la Estrategia Internacional de Naciones Unidas para la Reducción de Desastres  (EIRD).

La representante especial de la ONU para la Reducción de Desastres, Margareta Walhström, afirmó que “los desastres relacionados con el tiempo seguramente aumentarán en el futuro, debido a factores relacionados con el cambio climático ” y consideró que es de vital importancia que las ciudades planifiquen su urbanización para minimizar el riesgo de catástrofes.*

*Fuente: www.sosemergencias.com