Este blog se presenta como una herramienta de comunicación y consulta, donde plasmar las experienci

miércoles, 22 de junio de 2016

Condenan a 13 años a los encargados de un taller ilegal argentino que se incendió y dejó seis muertos

Condenan a 13 años a los encargados de un taller ilegal argentino que se incendió y dejó seis muertos

EFE
21/06/2016 - 22:54
Más noticias sobre:
Buenos Aires, 21 jun (EFE).- La Justicia argentina condenó hoy a 13 años de cárcel a los dos encargados de un taller textil clandestino cuyo incendio en 2006 acabó con la vida de seis bolivianos, entre ellos cinco menores de edad, y pidió investigar a los dueños de las marcas para las que fabricaban.
El Tribunal Oral Criminal número 5 de Buenos Aires condenó a Juan Manuel Correa y Luis Sillerico Condori por su responsabilidad en las seis muertes y por reducción a la servidumbre de sus trabajadores, confirmó a Efe la asociación Simbiosis Cultural, formada por personas bolivianas que trabajan o trabajaron en talleres textiles.
Además, pidió investigar, también en el ámbito penal, a Jaime Geiler y Daniel Fischberg, propietarios de las marcas de ropa masculina para las que trabajaba el taller, y a los policías y funcionarios que pudieron tener responsabilidad en el suceso.


En marzo de 2006, Wilfredo Quispe (15 años), Elías Carbajal (10), Luis Quispe y Rodrigo Quispe (ambos de 4 años), Harry Rodríguez (3) y la joven de 25 años Juana Vilca, que estaba embarazada, murieron en el incendio de un taller del barrio porteño de Caballito, donde trabajaban y vivían unas 60 personas en condiciones serviles.
La duración de la condena coincide con la petición del fiscal Fabián Céliz, quien además había solicitado el decomiso de la maquinaria y el inmueble, mientras que los querellantes y padres de Rodríguez, representados por la abogada Miriam Carsen, habían solicitado 20 años de cárcel para ambos.
Han sido "diez años de lucha" y "mucho dolor" que se va a extender durante "toda la vida", declaró a la prensa el padre de la víctima de 3 años, Luis Fernando Rodríguez, antes de pedir "justicia" frente a las puertas de los tribunales en los que se agolparon representantes de la colectividad boliviana y familiares de las víctimas durante toda la mañana.
En ese sentido, denunció que Geiler y Fischberg "ni siquiera" han sido citados y son los "verdaderos responsables" de todo lo que han "sufrido" los trabajadores de talleres textiles de la capital argentina, ya que, guiados por un interés "económico" lograron el "asesinato" de seis personas.
"Para mí es un dolor muy grande" que "estén en la calle caminando y trabajando, como si nada hubiera pasado", dijo Rodríguez.
Por su parte, Carsen criticó que durante el juicio no hubo "ningún tipo de arrepentimiento" por parte de los condenados, quienes no asumieron su responsabilidad y "ni siquiera" entendieron "por qué" son culpables.
Bajo su punto de vista, mostraron "un desprecio absoluto" por las víctimas, ya que, tal y como aseguró que dijo uno de ellos durante el juicio, que arrancó el pasado 18 de abril, consideraban el taller un "emprendimiento económico".
"Hubiera deseado que, como parte de la reparación para la familia, pidieran perdón", admitió Carsen.
El presidente de la Cámara de Senadores de Bolivia, José Alberto González, que era cónsul de Buenos Aires cuando ocurrió el suceso, afirmó en declaraciones a los medios que la sentencia es solo una "etapa" que seguramente dejará "satisfechas" a las familias de las víctimas.
Sin embargo, consideró que todavía "resta mucho por escribir" en términos de "responsabilidades", ya que solo se hará justicia "cuando se siente en el banquillo de los acusados a los señores Fischberg y Geiler".
González destacó que este juicio sienta un "precedente" para que quienes hoy en día son "víctimas" de este tipo de situaciones de "sometimiento" venzan el miedo y denuncien, y que aquellos que someten a los bolivianos a "condiciones de esclavitud" sepan que pueden ser sancionados por la justicia.
Según estimaciones de la organización civil La Alameda, solo en barrios como Flores o Avellaneda, en la zona sur de Buenos Aires, hay más de 3.000 talleres textiles clandestinos, con un promedio de siete a diez costureros, en conjunto, por lo que hay unas "30.000 personas esclavizadas en pleno siglo XXI".

No hay comentarios:

Publicar un comentario